lunes, 5 de febrero de 2024

Una persona amiga o familiar va a consulta de psicología ... ¿Cómo acompañar a alguien en terapia?

¿Cómo acompañar a alguien en terapia?
Si alguna persona cercana a ti toma el paso de ir a terapia, hay algunas pautas para que puedas apoyarle y acompañarle en este proceso . Sobre todo si es alguien muy cercano, como hijo, hija, pareja, madre... seguro que te interesa saber cómo afrontar todo esto.



Que alguien de tu círculo te diga que ha decidido ir a terapia es un aspecto importante en tu vínculo con esa persona. Quizá conozcas el motivo o quizá no, pero estoy segura de que si es alguien que te importa, querrás saber cómo afrontar este tema; que por otra parte suele ser motivo de creencias falsas, bulos y prejuicios, como vamos a ver enseguida.

1. Desmonta los prejuicios.


¿Cómo acompañar a alguien en terapia? 02



El primer paso para acompañar emocionalmente a alguien que asiste a terapia es romper los prejuicios al respecto. Las personas no van a terapia (solamente) porque tengan un trauma inmenso o una enfermedad mental. Puede ser por estos motivos, pero también se va a terapia porque se busque gestionar emociones, vivencias o relaciones que nos generan malestar.

Otras veces, podemos decidir tomar esta ayuda porque estemos pasando algún momento de crisis personal (profesional, amorosa, vital...), no sepamos cómo gestionar un duelo (que no siempre es por muerte, puede ser por rupturas, cambio de trabajo...) o no sabemos cómo tomar una decisión importante.

¡Figúrate si hay motivos! La terapia es simplemente un acompañamiento profesional para afrontar cualquiera de estas circunstancias que nos pueden afectar a cada persona y por eso mismo hay que NORMALIZARLA.

2. Respeta la privacidad.

Como te decía anteriormente, puede que la persona quiera hablar contigo de que va a terapia...o puede que no. Puede que quiera compartirte cómo se siente o si le está siendo útil...o quizá no le apetezca.
Suele suceder, sobre todo en caso de personas que son menores, que sus progenitores o personas adultas de referencia quieren saber más por el simple hecho de asegurarse cómo hacerlo lo mejor posible (y también por sentirse seguros acerca de la gravedad de lo que esté viviendo la persona que va a la terapia). En ese caso, siempre se puede concertar una cita aparte con la o el terapeuta en la que, sin entrar en detalles personales, podamos recibir información que nos tranquilice y/o nos oriente.

¿Cómo acompañar a alguien en terapia? 03

3.Ofrece tu compañía.

El "estar ahí" es a veces mucho más importante de lo que podamos tener en cuenta. Simplemente, acompañar, abrazar, compartir momentos de ocio o relax...ya va a ser de una ayuda grande, por tu parte, para la persona que va a terapia.

En la vida, a menudo no podemos (aunque nos encantaría) reducir el dolor o la angustia emocional de las personas a las que queremos. En estos momentos, simplemente estar presentes para ellos, ya es mucho dentro de nuestro papel.

4. Pregunta qué (y qué no) puedes hacer.

Y si aún después de todo esto te quedan dudas ("¿puedo preguntarle cómo se siente? ¿si cree que es útil? ¿Si nota mejoría?...") lo mejor es que, directamente busques un momento tranquilo y a solas con esa persona y le manifiestes tus dudas para que puedas saber sus preferencias al respecto.

Todos estos detalles seguro, van a ayudar a la persona que quieres a que poco a poco vaya sintiéndose mejor. ¿Te lo habías planteado?

Gracias por seguir en este viaje. 

 Por muchos momentos bonitos

22 comentarios:

  1. Muy interesante el post de hoy. Buenos días!

    ResponderEliminar
  2. Un post estupendo, me lo guardo porque son consejos realmente útiles. Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Por suerte aun no se me ha presentado la papeleta y espero que la cosa siga así, es buena señal.
    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Buenos días, muy buenas aportaciones para saber como actuar. Es cierto que a veces no sabemos muy bien por donde enfocarlo, y la normalidad como en todas las cosas de la vida es la vía mejor.
    Gracias, Noelia, una feliz semana.
    Besotes.

    ResponderEliminar
  5. Aveces el abrirse y dejar que fluya la conversacion hace que sepamos como afrontar la situacion, aunque es dificil

    ResponderEliminar
  6. Un post que sin duda merece ser leído.
    Debemos aprender a estar ahí y a normalizar estás situaciones.
    Besitos

    ResponderEliminar
  7. Buenos consejos, a veces no sabemos como actuar.
    Besos.

    ResponderEliminar
  8. Gran aporte, Noelia, una vez más... Simple, claro, importante.
    Abrazo hasta Nana y vos.

    ResponderEliminar
  9. Si, estar ahi, estar disponible, es importantisimo; crucial a veces. Muy interesante tema, Noe.
    Te mando un beso y feliz inicio de semana.

    ResponderEliminar
  10. Te agradezco la interesante entrada de hoy. Abrazos

    ResponderEliminar
  11. Creo que das unos consejos muy acertados y prácticos para acompañar a esa persona sin invadir su espacio ni juzgarla. Me gusta especialmente el punto de desmontar los prejuicios, ya que creo que hay mucha desinformación y estigma sobre la salud mental y la terapia. Yo también creo que hay que normalizarla y verla como una herramienta más para mejorar nuestra calidad de vida y nuestro bienestar emocional.

    Un beso

    ResponderEliminar
  12. Me apunto tus consejos Noelia, una nunca sabe cuando le pueden hacer falta. Un beso

    ResponderEliminar
  13. Hola!! un post muy interesante e importante. En mi familia el tema de ir a terapia es algo que se habla abiertamente, mi padre va desde hace muchísimos años y yo otros tantos. Besos

    ResponderEliminar
  14. Nos das buenos consejos para abordar una situación delicada y te lo agradezco, la información siempre viene bien.
    Besos!!

    ResponderEliminar
  15. Esta entrada sirve un montón para ambas partes 💜 muchas gracias.


    Un besote desde Plegarias en la Noche

    ResponderEliminar
  16. Súper interesante este post. Gracias.

    ResponderEliminar
  17. Hola Noe. Cero rollo con este tema. En mi casa siempre el ir a la consulta psicológica no difirió de ir a una consulta clínica.
    Siempre le he dicho a mi hija que: si te duele la cabeza vas al doc y si "te duele el alma" vas al psicólogo.
    De hecho he ido, en diferentes momentos de mi vida, a la psicóloga y en cualquier momento creo que volveré.
    Y mi hija, la primera vez que fue tenía 12 años. De allí en más, cada tanto también retoma.
    Abrazo ¡disfruta del finde!

    ResponderEliminar
  18. Muy interesante Noelia, hay situaciones que por muchas ganas que tengamos de ayudar no sabemos como manejarlas.
    Gracias por tratar temas así.
    BESOS

    ResponderEliminar
  19. Muchas gracias por estos consejos. Cuando murió mi madre la habría necesitado pero estábamos confinados, así que me ayudó on line mi cuñado psicologo y fui avanzando. Es u

    ResponderEliminar
  20. Perdón, se ha cortado, decía que es un tema necesario y hay que normalizarlo.
    Feliz día.

    ResponderEliminar