Cuando me hice este look con un labial bastante oscuro, aún quedaban (más) días de verano de los que restan hoy. Es raro recurrir a burdeos o borgoñas fuera del otoño invierno, pero ya sabéis que soy partidaria de que si algo apetece, hay que usarlo.
Además, lo combiné con un vestido de Mango que tiene este tipo de tonos y que hoy rescato de mi armario para repasar con vosotras este look.
Vamos al lío!