Esta semana Neogéminis nos ha lanzado el guante 😉. Nos invita a escribir bajo el reclamo "Noctámbulos" y la verdad es que es una idea que me sedujo enseguida.
Aquí va mi aportación, espero que te guste.
"De verdad que no entiendo cómo te puede gustar trasnochar tanto". - Claudia se sonreía mientras recordaba las palabras de su pareja, a quien escuchaba respirar suavemente en el dormitorio, con una cadencia que ya indicaba que su sueño era profundo.
Efectivamente, Juan, un hombre ordenado, de hábitos y de costumbres no entendería nunca lo que la noche le daba. Él era una persona de día, de hipotecas, de pies en la tierra.
Efectivamente, Juan, un hombre ordenado, de hábitos y de costumbres no entendería nunca lo que la noche le daba. Él era una persona de día, de hipotecas, de pies en la tierra.
En cambio Claudia... quizá esa forma de ser antagónica era la clave de su relación. Ella tan de aire, con la cabeza en las nubes. Se levantaba pasado el medio día y andaba por la casa con el pelo revuelto y la mirada perdida. A la tarde, echaba la jornada en la fábrica. Era un trabajo mecánico, no se sentía realizada pero tampoco le pesaba. Era un trabajo.
Sin embargo a la noche...¡ah, la noche!
Llegaba del trabajo siempre con algún invento del súper: "probemos estas giozas, Juan", "hoy cocinamos juntos, me han pasado una receta", "cariño...¡he traído un vino!". A veces Juan se maravillaba de ver su actividad. Cocinando, charlando, riendo...era pura vida.
Pero lo mejor llegaba luego. Cuando Juan, ya medio dormido se retiraba y ella se quedaba sentada en su mesita. Solo hacía una cosa: sentir.
Sentir como todos los ruidos se iban apagando poco a poco.
Ni coches.
Ni conversaciones.
Ni teles de bloques vecinos.
La luna y las estrellas son silenciosas y si acaso, algún maullido que daba hasta cierto atractivo a la velada.
Cuando ya todo se había ido apagando, Claudia encendía su lamparita, se servía una taza de té y abría su cuaderno. Ahí.
Ahí, justo entonces, se producía la magia.
Mi noctámbula favorita 💝
La entiendo.. Yo de noctámbula nada, pero si madrugadora.. a las 5 de la mañana es un gran momento, tan bueno con los de los trasnochadores.. todos los sonidos se oyen, el aire se respira.. me encanta salir a la calle a esas horas.. y regresar cuando el bullicio comienza..
ResponderEliminarComo planteamiento perfecto, bueno como relato también pero me ha despertado la curiosidad que escribe Claudia en ese cuaderno 📔
ResponderEliminarA veces paso alguna noche de insomnio aunque no llego a ser noctambula.
BESOS
El silencio de la noche es algo mágico, pero a mi la etapa de noctámbula se me ha pasado, ahora soy más de madrugar y pensé que eso no sucedería nunca.
ResponderEliminarBesos.
Ahí es donde está la magia, la noche, libreta y lápiz pueden ser un trio muy interesante. Me gusta tu relato. Besos
ResponderEliminarHay personas que la noche le seduce y ella era una, se activaba y sobre todo ese rincón donde reposar sus emociones y sentimientos la colmaba de felicidad.
ResponderEliminarMuy bonito. Un beso.
Teraz właśnie piję kawę :)
ResponderEliminarLa noche tiene grandes ventajas, suelo aprovecharla hasta la hora de levantarme y eso es temprano porque dormir es aburrido. Un abrazo
ResponderEliminarYo soy más de mañanas. Un beso
ResponderEliminarDe noche hay otro tipo de vida y de ritmo. Besos!
ResponderEliminarMe ha encantado el relato, aunque yo soy más de madrugar, jejeje.
ResponderEliminarUn buen relato
ResponderEliminarEntiendo perfectamente a Claudia. Cuando he estado de vacaciones y no tenía que levantarme de madrugada, había noches en las que el silencio y la escritura eran mis únicos objetivos. Besos :D
ResponderEliminarCada uno con su magia, muy bonito Noelia, me ha encantado. Abrazo.
ResponderEliminarYo también soy muy noctámbula, con la diferencia que por las mañanas madrugo! Pero lo que esta noche no me dejará dormir será pensar cómo sigue la historia, no nos dejes así, que ya has conseguido engancharnos...
ResponderEliminarBesis
Me gusta mucho , como todo lo que escribes 😘
ResponderEliminarNoelia, me gusta la claridad en tu relato y ese contraste de gustos y quizá de caracteres entre la pareja...La noche es muy inspiradora, recuerdo que mi primer poema se lo dediqué a la noche (a mis doce años) y sigo amando la noche, aunque sin olvidar que, dormir es muy importante para el cuerpo y la mente, amiga.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tu entrega y generosas letras, Noelia.
Me ha encantado el relato Noelia. Hay veces que el silencio es la mejor compañía. Un beso
ResponderEliminarSoy más madrugadora que noctámbula pero entiendo a Claudia porque también tengo mi momento aunque por la mañana bien tempranito
ResponderEliminarBesos
Yo también soy del club de las noctámbulas, por las mañanas no soy persona. Pero por la noche, como el par de felinos que tengo por casa, algo en mi cabeza se activa. Y estando ya con los cinco sentidos bien receptivos, mis dedos teclean decididos! Je, je! Un abrazote!
ResponderEliminarGreat Story. I also love the Night
ResponderEliminarPrecioso texto Noe!
ResponderEliminarLa noche es "mágica" con sus silencios y los propios.
Me enamoré de tu noctámbula favorita! Hermosa foto.
Va mi abrazo
Poetico relato y si, la noche tiene magia, es algo muy especial. Yo soy del team noche a full! *ੈ✩‧₊˚
ResponderEliminarBesos para vos y la noctambula michina del amor!
Un momento de estar con ella misma, con algún maullido de gato, las estrellas como techo, y sus sueños.
ResponderEliminarUn abrazo
Claudia era inteligente, usa el silencio de la noche para escribir. Precioso relato. Me encantó. Un abrazo
ResponderEliminarQué linda manera de trasnochar! Abriéndole paso a los sentidos para incentivar si imaginación al escribir! Muy bueno. Un abrazo Noelia y gracias por participar
ResponderEliminara muchas personas la noche les estimula, ya sea para salir con amigos, para ver la tele, para escribir, para escuchar música... o simplemente para estar, para sentir la magia nocturna, como claudia.
ResponderEliminaro como nana, por lo que se ve. ;)
besos!!
¡Hola, Noelia! ¡Qué bonito! Me ha encantado, vivía de noche para escribir, sin duda, una de las mejores cosas del mundo. Te felicito por tu relato, muy bueno.
ResponderEliminarUn abrazo. :)
No soy noctámbula de fiestas y salidas pero eso de ir abrazando poco a poco la noche si que va conmigo, en cierta forma soy bastante como Claudia. Muy bueno, besos.
ResponderEliminaruna transformación deseada y fozosa, dia a dia consumia las horas a la espera de una soledad donde pèrderse
ResponderEliminarYo soy diurno pero tengo insomnio. Me aficioné a los pams en el hospital.
ResponderEliminarY ¿cuando nos vas a enseñar lo que escribe, tu que tienes mas contacto con ella?
Nos llevaste por el ramal fiestero de la noche, pero nos recondujiste con suavidad.
abrazooo
Ay!! Que si, que ese momento donde se produce la magia es único. A veces lo extraño ya que mi trabajo me tiene levantada desde el amanecer, pero a veces cuando alguna idea anda dando vueltas, lo disfruto aunque al otro día ande con un pelín de sueño.
ResponderEliminarMuy lindo relato,
Abrazo,
Tienes razón en que los opuestos se atraen al principio y muchas veces, luego, esos mismos opuestos los separan. Me gusta tu gata , es muy linda. Besos
ResponderEliminarElla disfruta del silencio nocturno, el estar acompañada de si misma.
ResponderEliminarUn abrazo.
buen relato
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