A lo largo de nuestra vida pasamos por épocas de cambio, turbulencias o incluso de "pasar página" que no siempre sabemos gestionar. Empezar nuevas etapas con la sensación de dejar frentes abiertos afecta a nuestro bienestar, nuestra focalización e incluso en nuestra energía.
Hoy hablamos sobre cómo cerrar etapas.
1. Hacer duelo, mucho más que en las muertes.
Tenemos muy asociado que hacer duelo está relacionado con afrontar la muerte de un ser querido, pero en momentos de cambios vitales como un cambio de trabajo, de domicilio o una separación es necesario dedicarnos un tiempo para hacer duelo, esto es, desarrollar los mecanismos necesarios para vivir nuestra tristeza, ayudar a que nos limpie y poder continuar luego afrontando la vida.
Nuestras diferentes etapas vitales necesitan que atendamos a estos momentos de cambio para que sean afrontados lo mejor posible. ¿Y qué es una etapa vital?
Como te decía, cambiar de trabajo, de casa, una separación, empezar una carrera... son momentos en los que podemos necesitar cerrar etapas.

2. Pasos para cerrar etapas.
Del mismo modo que asociamos el duelo, solo a pérdidas relacionadas con fallecimientos, a menudo afrontamos los duelos cotidianos sin herramientas más allá del dolor. Te presento unos pasos que pueden ser útiles si tomamos conciencia de ellos.

Como puedes ver arriba, los pasos para cerrar etapas son:
1) Aprender a soltar: Crecemos asumiendo que algunas cosas son para siempre y por eso nos resulta a veces tan difícil dejar marchar. Quizá, si has madurado como persona sin plantearte este tema, necesitas pararte a reflexionar sobre esto. Las personas que nos rodean, los hábitos, los momentos... no son eternos y hay que saber dejar que pasen, aunque cuesta.
2) Analizar lo aprendido: Pararnos a tomar conciencia del aprendizaje hecho añade valor al momento triste. Sí, hay que hacer duelo de la etapa pero al menos nos llevamos una mochila de aprendizajes que nos enriquecerá para la vida.
3) Aprender de los errores: Un paso más allá. Seguro que en tu trayectoria anterior cometiste errores porque es humano, pero ¿qué aprendizjae te has llevado de ellos?
4) Proponerte nuevos objetivos: Nuevo momento, nuevas metas. Sirven de incentivo y de motivación: hacer un deporte nuevo, un club de lectura, aprender un idioma... el que tú quieras.
5) Perdonar(nos): El rencor es una emoción que nos ancla al pasado y no nos deja enfocarnos en el presente, ni disfrutarlo. Perdona y, si es necesario, perdónate.
Hola.
ResponderEliminarQué interesante. El último punto es complicado,no soy nada rencorosa en general, pero creo que si me viera envuelta en una mala separación, o se rompiese mi relación con alguien que quiero por algo grave seguramente tendría rencor.
Muy feliz día.
Muchísimas gracias por esta entrada, Noelia. Es una joya. Y además de una importancia vital, es muy importante saber sanar, cerrar los círculos, comprender qué ha pasado, como tú dices, vivir el duelo. Asociamos esa palabra a la muerte, y a veces, la muerte, es un comienzo de algo nuevo. Besos preciosa :D
ResponderEliminarEn general, no, y lo ves muy claro cuando hablas abiertamente de un cambio de etapa y de tu necesidad de duelo, como si les hablaras en klingorn cuando llegas a esa frase. Besos!
ResponderEliminarQué buenísima entrada. A mi me suele costar mucho cerrar algunas etapas así que me guardo tu entrada para leerla cuando lo necesite.
ResponderEliminarEn realidad a todos nos cuesta cerrar ciclos , etapas de nuestra vida, tan bien depende si hay que cerrarlas porque no es bueno para nuestra convivencia , o por fuerza mayor.
ResponderEliminarEl dolor no es el mismo, pero si hay que actuar y ser consecuente que todo en esta vida no es eterno.
Muy buena entrada, gracias Noelia.
Un beso.
Que buena entrada, me ha gustado mucho!
ResponderEliminarso good and helpful post!
ResponderEliminarQue he cerrado etapas... buenoooooo... el líder mundial soy.
ResponderEliminarQue lo haya hecho bien eso ya es otra cosa.
He cerrado tantas etapas que ya no sé si soy extraterrestre...
Un abrazo.
Que importante es perdonarnos a nosotros mismos para cada nuevo inicio.
ResponderEliminarSoy una persona a la que le gustan poco los cambios pero cuando se trata de cerrar etapas, creo que lo gestiono bastante bien.
Otra cosa es el dolor ante perdidas irreparables que siempre son más difíciles de superar.
Besitos
Pues a veces cuesta perdonarse a sí mismo, a mi me cuesta a veces dejar ir el dolor, pero bueno poco a poco voy aprendiendo.
ResponderEliminarBesos.
Me parece muy interesante la entrada guapa
ResponderEliminarNunca me había planteado el cerrar etapas como un duelo, pero con la edad he asumido lo que dices que las cosas no son para siempre, en esta vida todo son etapas y a veces toca reflexionar y sobre todo alegrarnos por lo aprendido, incluso las malas experiencias algo enseñan.
ResponderEliminarBesos.
Es difícil cerrar etapas, pero de eso está hecha la vida.
ResponderEliminarcuando era más joven, se me daba muy mal eso de cerrar etapas.
ResponderEliminardespués de la carrera, estuve un año de becario del programa citius en una empresa, al tiempo que hacía unos cursos que formaban parte de la beca. la mayor parte de ellos los elegí de psicología. fue una experiencia llena del color, la alegría y la vida social que me habían faltado en la carrera, y por eso no quería que acabara...
besos!
Fundamental esta entrada, amiga. Gran aporte.
ResponderEliminarAbrazo hasta allá.
Solo puedo darte las gracias por este post! Cuánta razón y cuánta ayuda me has dado! Estoy en un momento de estos que se necesitan cerrar etapas... estudié un master para cambiar mi vida profesional, dejé el trabajo por muchos motivos (el más importante es que mi mente ya no podía más, me estaba autodestruyendo) y ahora estoy abriendo una etapa nueva estudiando para oposiciones pero mentalmente no he cerrado la anterior... Hago como los autómatas sin darme esos momentos de reflexión, de duelo... Mil millones de gracias, me has ayudado muchísimo!
ResponderEliminarMiauuuuubesitos guapa!!! =^·^=
Creo que cerrar etapas también depende de cómo nos encontremos psicológicamente, si esa etapa nos ha tocado más, cuesta mucho más cerrarla. A veces lo vemos muy claro y otras nos cuesta algo más. Y, a veces, la gente no ayuda, porque no respetan esos momentos. Besos :-)
ResponderEliminarCreo que me cuesta bastante cerrar etapas, así que te agradezco mucho el post.
ResponderEliminarBesos
Muy interesantes estos pasos para cerrar etapas, Noelia. ¡Estamos constantemente aprendiendo!
ResponderEliminarUn besazo y feliz semana
Si no cierras etapas, te quedas en el camino.
ResponderEliminarSaludos
Que tal Noe!
ResponderEliminarsi, es muy bueno hacer el duelo de las etapas culminadas. Sobre todo si no lo deseabamos o no lo habiamos imaginado asi. Analizar lo vivido y, si fuera necesario, es muy importante: perdonarnos. Se puede.
Un besote.
Nos has dado una guía estupenda para entender qué nos pasa en ciertos momentos y cómo superarlo.
ResponderEliminarBesos.
Un post interesante. Creo que cuesta cerrar etapas
ResponderEliminarUn besito
Creo que de todo lo que más cuesta a veces es aprender a soltar, al menos en ciertos momentos me ha ocurrido. Saludos!
ResponderEliminarHola Noe, desde siempre he intentado cerrar etapas tanto como tomar el tiempo necesario del duelo que, como bien dices, no siempre tiene que ver con la muerte física de alguien.
ResponderEliminarEn ese sentido, el último duelo que hice fue hace una par de años cuando mi hija se separó. Su entonces marido era como un hijo para mi así que fue un verdadero duelo su "partida". Por supuesto, tomé mi tiempo y luego ¡etapa superada!
Beso ¡feliz domingo!
Nos cuesta mucho los cambios por el miedo, de ahí la importancia del soltar, dejar ir... al igual que los otros tips que dices.
ResponderEliminarYo creo que lo que cierra etapas es estar ocupado y hacer vida 😆 eso hace que te centres en otras cosas y te olvides! Una vez pasado ya lo ves diferente
ResponderEliminar