Cuando hice mi primera compra en Lime Crime, de unos labiales que ya les enseñé, no conocía la polémica que se extiende tras esta marca. Tampoco cuando compré los pigmentos que hoy les enseño. A pesar de ello, yo he vuelto a comprar en esta tienda (ya lo verán más adelante) porque los labiales sí que me gustan, pese a las críticas que por ahí se vierten relativas a que sus tonos se encuentran con las mismas prestaciones por mejores precios. Pero no adelantemos que les quiero contar varias cosas.
Vamos a ver primero esa polémica a la que me refiero...
Toda la historia viene a que, por lo visto, más de una blogger descubrió que los "exclusivos" pigmentos que Lime Crime vende bajo el eslogan de que son fabricados por ella misma, no lo son tanto (ni tan naturales) como se nos hace creer en la web de esta marca. Además, podemos encontrar empresas que venden tonos idénticos a los de Lime Crime a precios mucho menores y con los mismos ingredientes, por lo que la originalidad del producto queda en entredicho.
Además, parece sumarse a la polémica el hecho de que la fundadora de la marca se lo haya tomado digamos que, de una manera poco diplomática, con cruce de amenazas incluido.
Debo decir que toda esta información la he podido consultar gracias a compañeras bloggers como Purpurina y Athena, que me lo comentaron en aquel post que publiqué.
Ahora os cuento mi opinión sobre el tema...
- ¿Es Lime Crime una marca inocente, pura, vegana y super creativa?
- Pues va a ser que no, está claro que no si habéis leído los links de los parrafos anteriores.
- ¿Compro yo allí porque soy vegana?
- No
- ¿Compro yo allí por la exclusividad del producto?
- No
- ¿Compro yo allí porque me encantan los unicornios?
- No, ya sabéis que la Hello Kitty tampoco.
Entonces, Gadi, re-leches...¿porqué co**nes compras?
Porque tenía curiosidad por la marca, igual que por muchas otras. Porque me gustaban los colores de los labiales y de las sombras. Porque, vale, igual los 12 euros que cuestan los labiales no es un precio barato; tampoco lo es L'oreal, y si me gusta el tono, me lo compro igual.
Porque tenía curiosidad por la marca, igual que por muchas otras. Porque me gustaban los colores de los labiales y de las sombras. Porque, vale, igual los 12 euros que cuestan los labiales no es un precio barato; tampoco lo es L'oreal, y si me gusta el tono, me lo compro igual.
Estas aclaraciones las hago porque no quiero que nadie piense que soy bipolar (o gilipollas), al ofrecer información "negativa" de la marca y luego seguir comprando en ella. Tampoco quiero engañar a nadie. Que a mi me guste un producto aún con sus contras y que yo me lo compre, es problema mío. Allá cada cual con su dinero.
Sin embargo, también es verdad que, aunque los labiales me gustan y he vuelto a comprar algunos de ellos, de los pigmentos, que es el tema que nos ocupa ahora que me he quedado a gusto, no tengo la misma opinión...
Ahora os voy a enseñar los que pedí:
Como buena devoradora de colorines que soy, me pedí los 3 de la marca que me parecían más tentadores, que son:
- Dragon Scales:
Este tono es el que más me gusta de los 3 que compré. Como ven, es un rojizo intenso que vira a verde según le dé la luz, y sobre todo, si lo usamos con un jumbo debajo o en mojado. Me recuerda a la club de MAC o a la famosa Label Whore, no en el tono sino en la condición "cambiante".
- Medusa:
Este lo compré porque esperaba de él un "comportamiento" como el del anterior. Es decir, que fuese un oscuro que vira a otros tonos. Pero me he llevado un chasco. No solo veo un simple negro-clarete-con-shimer; sino que, además, al trabajarlo en mojado, se separa el color del brillo como pasaba con los de Barry M. La diferencia es que este es más caro, claro.
- Empress:
Un morado shimmer muy bonito. Pero poco más. Como él es verdad que puede haber cientos en el mercado.
Estos pigmentos salen a algo más de 10 euros cada uno, más los gastos de envío (unos siete euros).
Conclusión: Me gustan y me permito (quiero decir, a mi me parecen razonables) los labiales Lime Crime. Pero no sus pigmentos. Quitando el "Dragon Scales", que me parece precioso, el otro me parece un mal producto y el morado, montonero. De ello podríamos deducir que los pigmentos de esta marca son una lotería y por tanto yo, personalmente, no voy a probar más.
Espero que les haya sido útil este post.
Próximamente les enseñaré como quedan el Empress y el Dragon Scales. Con el Medusa no he conseguido hacer nada que me guste como para subirlo, y mira que lo he intentado.
BESOS!!
