Cuando hablamos de descanso, a menudo todos tenemos clara la máxima de las 8 horas. Pero, ¿qué sucede cuando más que de cantidad de sueño, estamos hablando de calidad del mismo? Es un tema que me preocupa más de unos años ahora, concretamente desde que he comenzado a hacer ejercicio: un buen descanso es necesario para que el entreno sirva.
1. Consejos para descansar …de verdad.
Acerca de consejos básicos para descansar bien, ya hablé en el blog hace unos meses en este post. Obviamente, no voy a repetirme, pero si quiero añadir algunas reflexiones:
↬La temperatura y la ropa: Sobre esto no hablé en el post anterior y puede parecer de perogrullo, pero no adaptar nuestra ropa para dormir a nuestras preferencias puede ser un fallo de base que nos esté perjudicando...mucho pijama mono, pero a veces no son cómodos. Personalmente, como mejor descanso es con una camisola o vestido bien ancho y me dejo, en la mesita de noche, un rebecón para cuando me levanto (odio las batas). La temperatura es otro cantar: donde vivimos hace mucho frío y es importante caldear algo la habitación...pero sin caer en temperaturas de primavera; se duerme mejor con el dormitorio tirando a fresco, que tirando a caldeado.
↬ ¿Y si me despierto a media noche?
A veces pasamos épocas en las que despertamos, siempre sobre la misma hora, de madrugada. Y si nos cuesta volver a conciliar el sueño, podemos entrar en un círculo vicioso difícil de resolver.
↬ Que despiertes puede tener un origen físico. ¿Te has acostado haciendo la digestión? ¿Has tomado mucho líquido en la cena? Observa tu cuerpo y qué cenaste cuando te despiertas: puede ser una reacción metabólica la que te hace despertar.
↬ Pero también puede tener una causa psicológica: ¿preocupaciones? Personalmente, cuando me estreso en el trabajo me sucede que despierto sobre las 3 y puede ser que pase hora, hora y media dando vueltas. ¡Lo odio! Y me pone muy nerviosa pensar que estoy perdiendo tiempo de sueño. He comprobado que me funciona:a) Identificar el motivo de mi preocupación
b) Pensar en una solución sencilla que abordar al día siguiente.
c) Adoptar una postura boca arriba, con las palmas y piernas semiabiertos ...y dejar mi mente vagar.
¡Así es como consigo retomar el sueño! (Ojalá os sirva si os pasa igual).
2. Algunos productos que ayudan.
Además, hay productos que nos ayudan con nuestro ritual de descanso. Os cuento cuáles tengo ahora a mano:
2.1. Bruma de almohada
A dormir bien se aprende, y lo mismo que el cuerpo "se vicia" o condiciona con el insomnio, podemos ayudarle a que asocie ciertos rituales y sensaciones con el descanso. Así es como funciona una bruma, que además y por añadidura, maneja olores relajantes. Y no hay aroma más asociado a la relajación que la lavanda, ¿verdad?Tiene 30 ml. y un pvp de 4'95, aquí.
2.2. Cojín de semillas.
Los cojines los usamos muchísimo en casa, para calmar pequeñas dolencias. Personalmente, me encanta usarlos para pequeñas molestias musculares o cervicales, e incluso para la inflamación y molestias de la menstruación: lo aplico calentito en mi tripa, a la altura del útero...y qué relax me da, qué alivio! Muchas noches me lo he llevado a la cama calentito (de hecho, mis hijas tienen peluches de semillas que calientan en el microondas) y relaja muchísimo si tengo, como digo, alguna molestia.
Además, el olor que desprenden las semillas es muy reconfortante y ayuda al fenómeno que comentaba anteriormente de condicionar al cuerpo...a favor del sueño. El que veis, es también de Treets.
Os recuerdo, como siempre, que estos productos forman parte de un sorteo en el perfil de Onlinecosmeticos en Instagram y en su Facebook (son sorteos diferenciados, y puedes participar en ambos...¡vamos!).
¿Cómo descansáis vosotras? ¿Habéis notado mucho la vuelta a la rutina?
¡BESOS!
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